Hace días y meses que no encuentro las palabras adecuadas. Me refugio en canciones que te hacen vibrar el alma con melodías pegadizas que cubren la zozobra de mi noche vacía. Pero hoy, y como siempre me pasa, me sigo asombrando cada vez más. Lo leí a él. Y eso que tanto quería decir, que tanto quería descifrar en mí, me lo dijo él y lo describe así:
"Y debo decir que confío plenamente en la casualidad de haberte conocido. Que nunca intentaré olvidarte, y que si lo hiciera, no lo conseguiría. Que me encanta mirarte y que te hago mío con sólo verte de lejos. Que adoro tus lunares y tu pecho me parece el paraíso. Que no fuiste el amor de mi vida, ni de mis días ni de mi momento. Pero que te quise, y que te quiero,aunque estemos destinados a no ser"
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